8 de abril de 2013

Análisis: Tomb Raider

El renacer de una superviviente


Por fin tenemos ante nosotros a uno de los Reboot más esperado de toda la generación, Tomb Raider, con el regreso de una de las protagonistas emblemáticas de la industria, Lara Croft, que se nos plantea ahora como una estudiante de 20 años con la pobre experiencia adquirida en excursiones y escaladas, y recién salida de la universidad, iniciará su famosa carrera como heroína y aventurera con esta violenta aventura para empezar a forjarse como una superviviente.

Desarrollado por Crystal Dinamics, los cuidadores de la franquicia desde es más que aceptable Tomb Raider: Legends, han querido adaptarse perfectamente a los tiempos que corren y han sabido aceptar que jugablemente, la saga rozaba el borde de la saturación y han querido adelantarse a ello y ofrecernos un título que se asemeja más a las exigencias de los jugadores de hoy en día y han hecho que Lara Croft siga vigente, y no se quede en un personaje de vieja escuela a únicamente recordar mientras acumula polvo en las estanterías de los mejores coleccionistas.

Y ya lo han dicho las ventas, a pesar de las quejas de Yoichi Wada, ex dirigente de Square Enix, su distribuidora, se ha convertido en el Tomb Raider más vendido de la historia. Y es que con esta importante transformación, ha pasado de ser un título de público minoritario a ser un título que abarque un amplio espectro de posibles jugadores, donde el nombre ha servido como aliciente para que se acerquen tanto los fans de los títulos anteriores como los nuevos jugadores, simplemente por pura curiosidad.

Y es que ahora mismo, la acción “pasillera” del estilo Uncharted gana enteros. Con una campaña bastante intensa y de una duración aceptable, donde nos cuentan los primeros pasos de Lara, según Crystal Dinamics, y nos enseñan a una Lara inexperta pero evolutiva. Ya que uno de los motivos que te da el juego es el de desarrollar a tu personaje al estilo del jugador, con maestrías al más puro estilo de Far Cry 3, diferenciando el combate, la supervivencia y la caza. Quizá no tan diferenciadas ni tan significativas, pero que se agradece ese toque rolero que nunca está de más, y aporta siempre variedad a los títulos, sobretodo a los más centrados a la acción.

Que decir de la jugabilidad, acción en tercera persona con sistema automático de coberturas con influencias, en ciertos momentos demasiado descaradas, a Uncharted, que conserva ese modo campaña de acción tan intensa que nunca decae, donde aquí es cierto que no llega alcanzar las cotas marcadas por la saga de Nathan Drake, pero donde Tomb Raider gana variabilidad por notarse más la mezcla de géneros, y ofrecer a cambio un complejo de escenarios más amplio, y un mayor abanico de posibilidades para afrontar las situaciones, aportando también esos momentos más plataformeros y los toques de rol que comentábamos antes, que compensan un poco el no estar al nivel de Uncharted en ese aspecto.

Luego está el tema de las coberturas, donde se ha criticado y tildado de ser demasiado “automático” y de lineal, aunque más bien aporta cierto dinamismo a los combates y evita el estar continuamente apretando un botón, para no hacerse tan pesado, y que finalmente resulta más agradable que repetitivo.

Comentemos ahora las sensaciones que nos transmite la trama. De primeras, habría que hablar sobre la evolución con respecto a los anteriores títulos de la franquicia Tomb Raider, donde desde la adquisición de la saga por parte de Crystal Dinamics y con respecto a los antiguos de Core Design la historia ha ido ganando enteros en ir pareciéndose más a un film de acción, ganando en espectacularidad, intensidad, con escenas al más puro estilo Hollywoodiense; pero a su vez, ir perdiendo esa magia y el misterio que caracterizaban a, sobretodo, los primeros títulos de la saga. Donde la trama sobrenatural estaba a flor de piel, y la sentíamos desde un primer momento; donde realmente nos dábamos cuenta de que nos encontrábamos ante un templo o una tumba, elementos característicos de la serie; con sus peligros, guardianes, trampas y hechizos que nos hacían temblar a cada paso que dábamos, y nos hacían pensar dos veces antes de adentrarnos en alguna zona o sala nueva, ya que la muerte vendría de la forma más inesperada posible.

Que eso no signifique que haya perdido esa trama “sobrenatural”, lo fantástico sigue vigente, pero se ha quedado en un escueto segundo plano, y las tumbas, trampas y los complicados puzzles se han sustituido por militares cabreados armados con todo tipo de máquinas de matar, y ya no vamos a ver osos, ni dinosaurios, ni nada que se les parezca. Tampoco podemos considerar a esos puzzles opcionales que encontraremos a lo largo de la aventura algo complicado ni crucial en el título. Sino como una manera de conservar parte del espíritu de la saga, que del que tan han querido alardear pero del que muy poco o prácticamente nada nos deja este reboot. Y es que no se puede negar su calidad, pero como obra totalmente independiente a los otros títulos, que no nos engañen.

Tampoco llega a verse una evolución del personaje tan significativa como a priori se nos presentaba. Al principio caerá mal, decían. Como personaje no tan inexperto como al final resulta parecer, Lara salta, esquiva, escala y dispara como una verdadera profesional, incluso mucho mejor, diría yo, que la propia Lara original. Tanto que incluso el juego se hace hasta sencillo incluso en el modo de dificultad más elevado. Con esto quiero decir que esa inocencia e inexperiencia que presenta el personaje no se ve reflejado en la jugabilidad, y que al final, los cambios evolutivos y el subir de nivel no es tan crucial como nos los pintan, sino más bien como aliciente para dar sensación de avance y progreso.

A nivel emocional si que es cierto que presenta durante la mayor parte del juego cierto tipo de inocencia o debilidad que en algún momento de los tramos finales se pierde de sopetón y nos enseñan ese “renacer” final, como excusa para bautizar al título de precuela, y darle algo de sentido a más del nombre. Un final, quizá no tan impactante como debería y que deja en evidencia a una trama en general bastante sosa, carente de originalidad y sin sorprender en absoluto. Aunque siendo el tipo de juego que es, tampoco es que vayamos a pedirle un mundo.

Quizá el fallo más gordo que podamos achacarle al título no está en lo que “podría haber sido” no sigamos esos senderos, si nos centramos en lo que es nos encontramos con fallos en la inteligencia artificial que lastran la ya de por si carente dificultad del título, esto unido al “instinto de supervivencia” que estropea el poco sentido de los puzzles y de algún que otro reto por muy insignificante que sea.

A más del modo multijugador, otra “inspiración” venida de los últimos Uncharted, aunque no tan bien implementada, si bien incluso se hace extraña en las primeras partidas, no le dedicaremos más que un curioso vistazo, de cómo mucho una horilla. Aunque tenemos la suerte de que haya sido desarrollado aparte, por otra compañía, y no haya afectado en nada al desarrollo de la campaña.

Destacar para bien, la banda sonora, algo que se ha tenido muy en cuenta a lo largo del desarrollo del título y que realmente se hace notar, sobre todo en los momentos más importantes de la aventura, y en definitiva, acompaña, y si Lara pudiese escucharla, se le haría mucho más llevadera su aventura en la isla del sufrimiento.

En definitiva, se trata de un gran título que hará delicias a todos aquellos que deseen un muy buen juego, tanto como si conocen a Lara como si es su primer título y no la habían catado antes (que ya es difícil). Redondo en la mayoría de sus apartados, y bastante cuidado y mimado por sus desarrolladores, que tienen a Lara como su fetiche personal y que han conseguido que siga vigente, para esta y posteriores generaciones. Donde no todos los personajes clásicos del mundo de los videojuegos pueden decir lo mismo.

Lo mejor:
  • Una nueva Lara, remodelada y llevada a los tiempos que corren.
  • Campaña con momentos de gran intensidad y acción pura.
  • CGI’s y apartado gráfico muy cuidado en general, mucho mejor en PC.
  • El toque de elementos plataformeros y de rol, lo hacen mucho mas llevadero.
  • La banda sonora, épica en todo momento, delicia para nuestros oídos.

Lo peor:
  • La carencia de dificultad, un motivo para echar atrás a los más expertos del género.
  • La trama tiene sus incoherencias y no termina de embrujar.
  • Se ha perdido prácticamente todo el espíritu de la saga.
  • Los puzzles son demasiado fáciles y no se les da mucha importancia.
  • El multijugador parece haberse hecho sin ganas, anecdótico.

Recomendado para: amantes del género de la acción directa e incluso para los más novatos, un juego muy apto para todo tipo de públicos. Resulta atractivo un acercamiento a la nueva Lara.

No recomendado para: jugadores que no les guste que la acción sea el elemento principal del juego. Esperabas un Tomb Raider como los anteriores. No te gusta el pelo de Lara.      


1 comentario:

  1. este juego lo tiene todo para estar entre los juegos del año, los gráficos, el ambiente, la Jugabilidad. a mi por lo menos me ha dejado encantado y ha diferencia de los de ps1 no me surge la duda de como hace lara para no irse para adelante con tanto peso en sus pechos jajajaja muy bueno el análisis y muy completo como siempre

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